"(...) y acusándome de una falta que no había cometido, le dije que había hecho lo que hacen las mujeres. (...) el buen padre me pintó el mal tan grande, que concebí que el placer debía ser extremo; y al deseo de saber sólo en qué consistía, sucedió el de enterarme por mí misma".
(Carta LXXXI, de la marquesa de Merteuil al vizconde de Valmont. "Las amistades peligrosas", Choderlos de Laclos)
lunes, 8 de octubre de 2007
Y maté los sueños para, despierta, descubrirme disfrutanto realidades.
1 comentario:
Es que no hay nada como estar despierto!
Me alegro y que dure!
Escrito por Pequena 08/10/2007 21:55
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