miércoles, 1 de abril de 2009

Escenas de café

ELLA: ¿El tocador de señoras, por favor?
ÉL: Dígame, ¿en qué la puedo ayudar?

.........................

ELLA: Y a usted, ¿le pongo algo?
ÉL: Mucho, me pone usted mucho.

15 comentarios:

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Diálogos tan abertos nos que caben infinidade de probabilidades.
A inxenuidade/naturalidade pode acabar por seducir.

A situación recórdame aquela frase atribuida a Quevedo, que apostou cos sus amigos, a que era capaz de decirlle a reina que estaba naquel intre coxa; presentouse Quevedo cun ramo de frores e dixolle presuntamente a reina ”Su Majestad escoja“

HADEX dijo...

Sí a anécdota de Quevedo é literalmente: "Entre el blanco clavel y la rosa roja, su majestad escoja". Precioso.

Isabel dijo...

¿pero le ponía antes, o despues de ir al tocador?. Los juegos de palabras me encantan. Un beso

Chousa da Alcandra dijo...

E Quevedo gañou a aposta por chamarlle coxa á raíña...

De onde virá a denominación de "tocador"?
De onde virá a denominación de "poner"?


Bicos mil en abril (e que tou feito un poeta)

Silvia_D dijo...

Jjajaajaj me pone, me poneeeeeeee!!

Besos, cariño

A lareira de Santiso dijo...

Arrancan o sonriso só catro frases. Brillantes!

irene dijo...

Hoy me hace especialmente bien reír, gracias Markesa.
Un beso.

Deambulando con Artabria dijo...

Esto fue en un bar??!! Porque quiero la dirección, jajaja

Jordicine dijo...

Es bueno ser directo. Ja ja ja. Besos.

Markesa Merteuil dijo...

Creo, Xan y Hadex, que ese ingenio fue uno de los más comentados durante nuestras infancias, y es que en aquel entonces no teníamos tanto amor al sofá y al videojuego como los niños de ahora, y aún nos reíamos de las ocurrencias de otros. De otros a los que podíamos tocar y que, si sonreían ante nosotros, era a nosotros a quien sonreían. Estoy un poquito apocalíptica hoy, ¿no? O tal vez sólo un pelín contrariada. Esto de que matemos las capacidades de socializarnos y de hacer chanzas realmente ingeniosas me irrita un poquito, pero sólo un poquito. Tampoco creo que haya que tirar la toalla; aún es posible recuperarlos. El potencial está ahí; sólo hay que empujarlos (con toda la brusquedad que sea precisa) a disfrutar auténticamente de la vida.

Isabel, a mí también. Lo que pasa es que cada vez es más frecuente que nos falte espontaneidad.

Poeta Chousa, non che teño nin idea, pero seguro que se se pasa un anaquiño por aquí Hadex e te le pode darche unha resposta a iso. :-)

DianNa... me ponía más que me pone. (Ponedoras son las gallinas. Uy, nueva asociación de ideas. Me callo, me callo).

A Lareira de Santiso, moitas grazas. Alégrome de que che gustara. Ás veces vén ben unha excusa para sorrir.

Irene, nos hace falta siempre. Ojalá que siempre te sobren los motivos para hacerlo. :-)

Artabria, la segunda sí. ;-)

Jordi, y a veces es bueno morderse la lengua... :-)

Yyrkoon dijo...

juas, tan buenos como viejos, hacía tiempo que no oía eso.

Rosa dijo...

Buenísimos, jajajajajaj
Un abrazo.

Markesa Merteuil dijo...

Es que una es un poco carca, Yyrkoon. :) :P

Gracias, Rosa; otro para ti.

Mar dijo...

Hola guapísima ya estoy por aqui otra vez, te he echado muchooooooo de menos.

Besitosssssssssssssssssss