"(...) y acusándome de una falta que no había cometido, le dije que había hecho lo que hacen las mujeres. (...) el buen padre me pintó el mal tan grande, que concebí que el placer debía ser extremo; y al deseo de saber sólo en qué consistía, sucedió el de enterarme por mí misma". (Carta LXXXI, de la marquesa de Merteuil al vizconde de Valmont. "Las amistades peligrosas", Choderlos de Laclos)
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8 comentarios:
Espero que encuentres "ese ombligo amigo". Hay dias dificiles, pero por la mañana vuelve a salir el sol, animo guapa. Un beso
Sí que choveu hoxe, si. Probaches cun paraugas?
(Nunca choveu que non escampase!. Para entón podes usalo como sombrilla...)
Quizás miras demasiado el ombligo.........y hay que mirar un poco más allá...........tal vez veas las cosas más claras....
Gracias, Isabel.
Ai, Chousiña... penso que necesito un que me guareza da insensatez. Xa che contarei.
Artabria... ¿tú sabes lo calentita que se está escondida en un ombligo? :D Lo malo es que soy demasiado grande, aunque a veces me sienta tan chiquita.
Hace mucho, muchísimo, que no soy capaz de hacerme tan pequeña como para poder guarecerme en ningún ombligo, o tal vez no sea capaz de encontrarlo.
Un abrazo, Markesa.
Non sei se te serviría un obligo vello, pero de ser así, tes o meu a túa disposición.
Ti es unha rapaciña nova, pero con mentalidade moi madura. Síntome o teu admirador.
Un biquiño agarimoso
Pues a buscar ese obligo, MARKESA. Seguro que tienes muchos candidatos. Un beso.
Un embigo ou o que fose polos arredores. Eu tamén quería...Bico grande
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