"(...) y acusándome de una falta que no había cometido, le dije que había hecho lo que hacen las mujeres. (...) el buen padre me pintó el mal tan grande, que concebí que el placer debía ser extremo; y al deseo de saber sólo en qué consistía, sucedió el de enterarme por mí misma".
(Carta LXXXI, de la marquesa de Merteuil al vizconde de Valmont. "Las amistades peligrosas", Choderlos de Laclos)
viernes, 13 de noviembre de 2009
Cuando los besos saben a alquitrán, todo lo devastan.
Pero lo bueno del alquitrán es que echas otra capa y ya queda perfecto, o bien le echas un poco de gravilla, pero en ese caso, al poco tiempo vuelve a estar "devastado".........y entonces se malgasta mucho tiempo y mucho esfuerzo.....
Creo que del receptor, Irene. Porque cuando ves el chapapote hay que huir, en lugar de imaginar que se trata de petróleo... :-) Aunque el emisor tiene también parte de culpa puesto que algo tendrá que ver con el proceso de transformación y de incontinencia, ¿no?
7 comentarios:
Pero lo bueno del alquitrán es que echas otra capa y ya queda perfecto, o bien le echas un poco de gravilla, pero en ese caso, al poco tiempo vuelve a estar "devastado".........y entonces se malgasta mucho tiempo y mucho esfuerzo.....
Fala coa xente do Ministerio de Fomento para que leven o aquitrán...e che deixen os bicos sabendo a bicosssss
Bicos de Antas (sin chapa-pote)
Los besos deben saber a miel, el alquitrán debe saber fatal. Un beso
¿Y quién es el culpable?, el que los da o el que los recibe.
Un beso, Markesa.
Creo que del receptor, Irene. Porque cuando ves el chapapote hay que huir, en lugar de imaginar que se trata de petróleo... :-) Aunque el emisor tiene también parte de culpa puesto que algo tendrá que ver con el proceso de transformación y de incontinencia, ¿no?
Besos con sabor a alquitrán?, sinceramente, yo paso...
El receptor, y tb el emisor markesa, xk el chapapote puede verse o no, pero si es "remodelado" y vendido como pastel, el receptor no puede evitarlo.
Un bezzZzz
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